La Guardia Costera de EEUU informó que los «restos» fueron encontrados por un robot en la zona de búsqueda del submarino desaparecido el domingo.
La Guardia Costera de Estados Unidos informó en el mediodía de este jueves que «un campo de restos» aún sin identificar fue hallado cerca del Titanic por los equipos que buscan al submarino turístico que desapareció el domingo en el Atlántico Norte con cinco personas a bordo.
«Los expertos del mando unificado están evaluando la información», dijo el servicio costero en un tuit.
Los restos fueron hallados en la «zona de búsqueda de un ROV, un vehículo operado remotamente, cerca del Titanic», aunque el servicio de guardacostas no ofreció más detalles al momento. A las 19:00 hora local está prevista una conferencia de prensa en Boston, centro de esta operación que involucra a varios países.
EQUIPOS.
La detección de ruidos bajo el agua en la zona de búsqueda en los últimos días reavivó la esperanza de encontrar al sumergible y centró la búsqueda de barcos y aviones en una superficie de unos 20 mil kilómetros cuadrados, casi del tamaño de El Salvador.
La ubicación de la búsqueda «vuelve excepcionalmente difícil la movilización rápida de grandes cantidades de equipamiento», reconoció la víspera el capitán de los guardacostas Jamie Frederick.
En total, una decena de barcos, con ayuda de robots de control remoto (ROV, por sus siglas en inglés) forman parte del dispositivo internacional que participa en la búsqueda del sumergible.
Otro robot de la empresa de cartografía en aguas profundas Magellan, tenía previsto llegar desde Gran Bretaña en la tarde de este jueves para sumarse al peinado de los fondos marinos.
SEGURIDAD.
En los últimos días salió a la luz de un informe sobre las posibles deficiencias de seguridad de la nave.
El exdirector de operaciones marinas de OceanGate Expeditions, la empresa fabricante, David Lochridge, despedido por haber cuestionado la seguridad del Titán, mencionó en una demanda judicial el «diseño experimental y no probado» del sumergible.
Según Lochridge, un ojo de buey de la parte delantera del aparato fue concebido para resistir a la presión a 1.300 metros de profundidad, y no a 4.000 metros.
Según el profesor de ingeniería marina en el University College London, Alistair Greig, el Titán habría podido sufrir un problema eléctrico o de comunicaciones, lo que no le habría impedido subir a la superficie, o que el casco estuviera dañado, con lo que las esperanzas de encontrar a los cinco pasajeros con vida se disiparían.
VIAJE «ATERRADOR».
Tom Zaller contó a la AFP su experiencia hace 23 años en una inmersión similar a la del domingo para visitar los restos del naufragio más famoso de la historia.
«A medida que bajas más y más, se vuelve más oscuro», y más «frío», contó. Tras ver el vídeo que grabó de sí mismo en las profundidades marinas, vio que «estaba completamente aterrorizado».
«Estuve en ese sumergible por 12 horas con todo marchando de acuerdo al plan», comentó, pero «no me puedo ni imaginar» lo que es estar varios días encerrado en un habitáculo donde no hay espacio para moverse, ni para ir al baño.
FUENTE: AFP